Solidaridad mexicana
Tras la primera visita de un grupo de representantes del Frente POLISARIO a México en 1975, la solidaridad de este pueblo se ha mantenido vigente a través de diversas agrupaciones de la Sociedad Civil. En los primeros años, un grupo de amistad se creo gracias a la coordinación de personajes como el investigador Jesús Contreras Granguillhome y la antropóloga Silvia Sandoval, favoreciendo el trabajo político, académico y cultural para posicionar el tema en México.
Luego de algunos años de inactividad, en el 2005 surgió la inquietud de dar seguimiento a estos esfuerzos solidarios en torno a la causa saharaui, por lo que se conformó oficialmente la Asociación Mexicana de Amistad con la República Árabe Saharaui (AMARAS), teniendo como primer presidente al escritor Victor Hugo Rascón Banda. Desde entonces, desde la asociación se han articulado actividades de difusión y promoción de la cultura saharaui, realizado ciclos de conferencias dirigidos a ámbitos académicos y gubernamentales, organizado actividades solidarias y emitido claros posicionamientos desde México.
Es preciso destacar que, tras el lamentable fallecimiento del primer presidente, su lugar fue ocupado por otra destacada figura: Virgilio Caballero; quien en 1977 había documentado directamente la lucha armada que tuvo lugar en el Sáhara, siendo así uno de los primeros periodistas latinoamericanos en presenciar la guerra para informar a la comunidad mexicana.
Por otro lado, en México también se encuentra la Asociación de Amigos por un Sáhara Libre, agrupación sin fines de lucro constituida en el 2014 como colectivo, pero que en 2020 comenzó a ser una Asociación bajo la presidencia de Antonio Abdallahy Velázquez, cuya solidaridad con el pueblo saharaui es una de las más destacables desde este país, especialmente por su participación y la cobertura que, a partir de esto, dio a los sucesos de Gdeim Izik.
Desde los espacios de esta organización, se realizan diversas actividades de difusión de la lucha y la cultura saharaui, además de establecer alianzas colaborativas a través de las cuales recaudan fondos para sostener sus proyectos en los campamentos de refugiados, mismos que se enfocan en temas de educación, cultura, deporte, salud y bienestar social.
Para dar seguimiento a las actividades organizadas por AMARAS o el Colectivo, es posible seguirlos a través de sus sitios oficiales. Mismos que se encuentran a continuación.